Hay momentos en la vida de las personas que no se piensa en lo mejor para sí mismo, sino para otra persona.
Puede que ese pensamiento nos afecte a nosotros porque la otra persona piense que es todo mentira lo que le decías pero no.
Hay ocasiones en que todo se hace por una tercera persona indefensa y triste y solitaria.
Hay ocasiones en que lo que se dice no es cierto, por ejemplo un: no te quiero, lo siento.
Mientras la otra persona cree que lo pasa mal, tú lo pasas peor, por haberlo dicho y a la vez sentido, por todas esas lágrimas que nadie, (excepto esa chica que te anima) , nunca sabrá.
Sólo quería transmitir una moraleja:
No todo lo que se dice es cierto,
todo lo que no se dice es verdad.
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